Total de ojivas neutralizadas: 3.600 unidades Modo de operación: Totalmente no tripulado, controlado a distancia Monitoreo: Sistema de cámaras de alta resolución, 24/7 Sistema de manipulación: Cinta transportadora con carga automática Sujeción: Abrazaderas de precisión diseñadas para ojivas Perforación: Taladros robóticos de múltiples cabezales con guías de alineación Características de seguridad: Protocolos a prueba de fallos, contención sellada Tiempo de ciclo: Operación continua para destrucción a gran escala
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El problema que enfrentamos Las armas químicas están entre las herramientas de guerra más temidas jamás creadas. Una sola ojiva puede liberar agentes tóxicos capaces de matar a miles, contaminar regiones enteras y dejar efectos devastadores y duraderos en la salud humana y el medio ambiente. Muchos países tienen stocks de estas armas procedentes de conflictos pasados. Aunque ya no están destinadas a ser utilizadas, no pueden descartarse como simple chatarra. Cada ojiva es una bomba de tiempo: carcasas envejecidas, envolventes corroídos y rellenos químicos inestables las hacen extremadamente peligrosas de manipular. El reto no es solo cómo destruirlas de forma segura, sino cómo hacerlo a gran escala, ya que miles de estas ojivas pueden estar almacenadas en depósitos alrededor del mundo. Los métodos tradicionales de eliminación manual exponen a los trabajadores a riesgos catastróficos. Un solo movimiento en falso podría provocar la liberación de gases letales. Está claro que se necesitaba una nueva solución —una que mantuviera a las personas completamente fuera de peligro. La solución: Una instalación no tripulada y totalmente automatizada Los ingenieros de Neometrix diseñaron y desarrollaron un sistema completamente no tripulado, totalmente automatizado y controlado a distancia, capaz de destruir ojivas químicas sin contacto humano directo. Esta instalación no es solo una máquina: es un ecosistema robótico completo donde las municiones letales se manejan con más precisión que el bisturí de un cirujano. • Unidades totales neutralizadas: 3.600 ojivas químicas • Exposición humana: Ninguna • Modo de operación: Controlada a distancia, guiada por cámaras, funcionamiento seguro 24/7 Proceso paso a paso Para simplificarlo, piense en esta instalación como una «línea de producción de seguridad» donde cada ojiva peligrosa se procesa automáticamente de principio a fin. 1. Carga en cinta transportadora Las ojivas se colocan cuidadosamente sobre un sistema de cinta transportadora, que actúa como una pista móvil para llevarlas al interior de la máquina. Esto garantiza que no haya levantamiento, manipulación ni contacto manual con las unidades peligrosas. 2. Sujeción de precisión Una vez dentro, la ojiva se fija en su posición mediante abrazaderas diseñadas con precisión. Estas abrazaderas están ideadas para que la ojiva no se mueva ni una fracción de milímetro, evitando cualquier riesgo de fuga o daño accidental. 3. Operación de perforación con múltiples cabezales En esta etapa entran en acción las máquinas de perforación con múltiples cabezales. Se trata de cabezales de taladro robóticos especialmente diseñados que perforan el recubrimiento de la ojiva en puntos exactos y precalculados. ▹ La perforación se realiza bajo estrictos sistemas de guía. ▹ Guías de ubicación garantizan que cada taladro esté en el lugar correcto, en todo momento. ▹ Esto evita rupturas incontroladas y asegura que los productos químicos queden contenidos de forma segura. 4. Monitoreo continuo mediante cámaras Cada segundo del proceso se supervisa mediante cámaras de alta resolución. Los operarios, situados de forma segura en una sala de control remota, pueden ver la operación en directo. Si sucede algo inesperado, pueden detener el sistema al instante. 5. Manipulación y eliminación automatizadas Una vez perforada, la ojiva se procesa adicionalmente para su neutralización. El sistema prepara el fuselaje para su eliminación segura y lo traslada fuera de la cámara activa, mientras la siguiente ojiva entra automáticamente por la cinta transportadora. 6. Repetir hasta completar Este ciclo se repite con precisión relojera, permitiendo a la instalación destruir miles de ojivas sin pausa —de manera fiable, segura y eficiente. Características críticas de seguridad • Operación no tripulada: Ninguna persona se aproxima a las ojivas tóxicas. • Centro de mando remoto: Los operadores controlan todo el proceso desde una ubicación segura y distante. • Protocolos a prueba de fallos: Si el sistema detecta movimiento irregular, presión anómala o desalineación, se detiene instantáneamente. • Guías de alineación de precisión: Aseguran que la perforación siempre ocurra en el punto correcto —incluso unos pocos milímetros de error podrían ser catastróficos. • Estructura sellada: Toda la instalación está cerrada y diseñada para contener cualquier fuga accidental. Por qué esto es revolucionario 1. Riesgo humano cero: Los métodos tradicionales requerían trabajadores con trajes protectores, siempre a una posible accidente de distancia. Esta máquina elimina totalmente ese riesgo. 2. Destrucción a gran escala: Destruir 3.600 ojivas a mano podría llevar años; este sistema las procesa de forma continua y eficiente. 3. Precisión de ingeniería: No es solo una unidad de eliminación: es la conjunción de robótica, automatización, ingeniería de seguridad y diseño de nivel militar. 4. Impacto global: Tales sistemas son vitales para programas internacionales de desarme, ayudando a los países a eliminar stock de forma segura conforme a tratados sobre armas químicas. Explicación de la criticidad mediante una analogía Piense en una fábrica que embotella refrescos. Las botellas se transportan por una cinta, se llenan, se tapan y se sacan automáticamente. Ahora imagine que, en lugar de refrescos, la cinta transporta bombas letales llenas de gas venenoso. Cada paso del proceso debe ser perfecto: sujetar la ojiva de forma estable, perforarla sin agrietarla y neutralizarla sin derramar ni una gota. A diferencia de una botella desperdiciada, un solo error aquí puede significar una catástrofe. Ese es el nivel de precisión y seriedad requerido. El legado Al crear esta instalación, Neometrix Defence ha demostrado que incluso las armas más peligrosas pueden neutralizarse sin poner en riesgo vidas humanas. No es solo una máquina: es un monumento a la ingeniosidad en ingeniería y a la seguridad humana, que muestra cómo la tecnología puede convertir instrumentos de guerra en símbolos de paz.